En la edición de este año del Festival de Cannes sucedió algo inédito: Netflix estrenó por primera vez una película en competencia oficial. Se trata de Okja (2017), la nueva cinta del surcoreano Bong Joon-Ho (El huésped, 2006; El expreso del miedo, 2013), que a partir de mañana estará disponible en la plataforma.
El hecho abrió un nuevo (y polémico) capítulo en la historia del festival. Thierry Frémaux, el delegado de Cannes, y varias distribuidoras fílmicas se quejaron de que la película nunca podría verse en salas. Por si fuera poco, un error de proyección en la función de prensa avivó el fuego: empezó a subir el telón para dar inicio a la proyección, pero no alcanzó su altura máxima y se quedó atorado, tapando la cara de quienes aparecían en pantalla. El error fue recibido con abucheos, gritos y aplausos; así pasaron alrededor de diez minutos, hasta que la pantalla se apagó y comenzó de nuevo la función, ya sin problema alguno.
Okja cuenta la historia de un miracle pig, una nueva raza de mamífero encontrada en Chile con la cual se buscará revertir la hambruna en el mundo. Una empresa llamada Mirando, cuya directora es interpretada por Tilda Swinton, ve potencial en este animal y decide enviar un espécimen a cada lugar del planeta, para que agricultores y ganaderos lo cuiden y alimenten.
La cinta no sólo aborda los oscuros intereses de las empresas alimentarias, también cuenta una historia de amistad, lucha y solidaridad entre una pequeña niña llamada Mija y su mascota, uno de estos mamíferos. La cruel realidad a la que nos enfrenta Bong es la del maltrato animal y los intereses mezquinos de quienes buscan vender su carne a toda costa.
El gran mérito del director ha sido crear un animal fantástico y enternecedor, que impacta emocionalmente a los espectadores. Okja se convirtió en una de las películas más importantes de Cannes 2017, cuyo cartel, para muchos críticos, tuvo un exceso de cintas pesimistas y crueles.
La buena noticia es que la película podrá ser vista por todas las personas inscritas en la plataforma, que cada vez son más. La mala: jamás podrá ser apreciada en pantalla grande, en su máximo esplendor. Más allá de la polémica, lo cierto es que Netflix produjo una película notable, que vale la pena agregar a la lista de favoritos.
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